The time is gone, the song is over...

martes, 2 de junio de 2009


No ha sido flojera ni nada por el estilo. Han pasado las semanas y resulta que ya estamos a mitad de año. Hay una cuenta regresiva y el tiempo es un bien limitado. Algún día de estos me dedicaré sólo a imaginar, tomaré nota de todo eso que no puedo exteriorizar de otra forma; eso que no pienso, sino que fluye directamente a las yemas de mis dedos.

Aparece ante mis ojos una bifurcación. Sin embargo, no sé distinguir cuál es el camino largo y cuál el corto. Tengo tiempo para pensar; además la prudencia me dice que no debo ilusionarme con lo desconocido. Elegiré al azar, pensando sólo en la decisión que me haga más feliz en ese momento; no por idiotez, sino que por incertidumbre.

Tengo que hacerme un plan de acción; una lista de sueños a alcanzar. Pero no quiero; me gusta cómo suenan las tablas de este puente cuando me subo a la baranda, el ruido del agua caudalosa, la emoción de llegar al otro lado…

1 comentario:

Anónimo dijo...

El camino más corto no implica que sea el más fácil, o en caso de que sea el más fácil,que puedes aprender de él....sin fin...no se muy bien a que te refieres, pero me agrada que hayas vuelto a escribir
te quiero!

"S"